Simplemente no puedo estar a dieta. Ni quiero ¡ojo! pero sí es verdad que en verano entre helados, cócteles y picoteo se me va un poco de las manos, y después intento comer un poco menos, cambiar algún hábito y dejar de lado desde el 1 de septiembre los heladitos.
Pero no puedo quitarme el dulce, es que no puedo. Me supera, no quiero morir pensando, que no disfrute la vida porque me quité de los dulces. Vale, vale, suena muy radical, pero mientras me mantenga sana y bien, mi trocito de tarta no me lo va a quitar nadie. Pero claro, después de haber estado unas horas en el gimnasio y sentirme mejor, no voy a meterme al cuerpo un trozaco de bizcocho o un par de muffins, es lo que me apetece sí, pero mejor aguantar jaja Así que para callar un poco la vocecita que me dice : honey tinonino nino, oh sugar sugar! pues me como un trozo de este bizcocho y ale, la voz se calle y ya no me molesta hasta la hora de comer.
No es que se la pusiera a nadie para su cumpleaños, pero si os pasa como a mi y queréis comer algo más sano, podéis optar por este bizcocho.
Ingredientes
- Harina/copos de avena – 160 gr
- Stevia – 1 sobrecito o 15 gotitas
- Claras de huevo – 4
- Sal – pizca
- Limon – dos o uno bien grande
- Naranja – una pequeña
- Yogur natural 0% – uno
- Levadura – medio sobre
*Aquí os dejo una pequeña lista donde podéis encontrar (a buenos precios) :
Preparación
Si tenéis copos de avena como yo, la metéis en una thermomix o en una picadora hasta que se haga tan fina como la harina, si no, podéis comprar directamente harina de avena. Reservamos. Exprimimos los dos limones y la naranja y también rallamos la ralladura de cada uno de ellos. Lo mezclamos con la harina de avena y con el resto de ingredientes, hasta que quede homogéneo. Si veis que queda muy espesa, añadid una clara más, es mejor que quede una mezcla ligera. Lo echamos a un molde de silicona y lo dejamos en el horno precalentado a 160ºC durante unos 20/25 o hasta que veáis que está hecho por dentro. Desmoldamos y dejamos enfriar. Listo para cuando el cuerpo os pida demasiado azúcar y queráis engañarle un poquito.
*Uso claras pasteurizadas de pascual, las tenéis en cualquier gran almacén.
*Si no tenéis stevia, podéis echar miel, una cucharada bien colmada.
*Podéis echar dos naranjas y un limón, o sólo limón, sólo naranja…. yo la primera vez lo hice con más naranja y en mi caso fue un error, porque no es que sea mi fruta favorita, de limón me gusta más jeje.
oleeeeeeeeee mi niña y su bizcocho antimichelines ajajajajjajajajaa. mu requetebueno y eso tu dale al gimnasio jijij
besoteeeeeeeee
jajajaja algo hay que hacer que si no el deporte no me sirve para nada jejeje
un besazooo
síiiiiiiii un bizcocho light!!!! barambaburuba barambanbum
me alegro de que te gusteee ^^
se deja comer para ser light jajaja
iré subiendo más poco a poco =)
Como! He leido fitness? Yo que pensaba que sería un bizcocho milagro para perder de golpe todas esas curvas que están donde no deberían, y mi gozo en un pozo, simplemente es para no aumentarlas, jajaja!!!
Me encanta la sencillez de este bizcocho, y además si nos va a mantener un poquito a raya, fantástico!
Besos!
jajaja es que eso es pedir mucho!! no sabes ná jaja
hombre! con no aumentarlas, es ya un gran paso… que luego perderlas es todo un reto 🙂
muchas gracias!! es una pequeña ayuda , nada más 😉 jiji
Un beso grande!!